lunes, 31 de marzo de 2008

Situación de la infancia en el conflicto armado colombiano

Se estima que en Colombia hay entre 11.000 y 14.000 niños en el conflicto armado. 1 de cada 4 combatientes es un niño, lo alarmante es que se están utilizando niños desde los 6 años para trabajos de inteligencia, sembrar minas anti-personas, llevar explosivos.

En Colombia se da un fenómeno muy particular desde hace años hasta la realidad de hoy en los grupos armados, y en el surgimiento de nuevas bandas están todos vinculados con el narcotráfico, lo que redefine el concepto de estos grupos, son grupos narco-armados, así se considera este grupo por parte de la Missiòn Diplomatique, los niños y niñas colombianos en los grupos narco-armados generalmente reciben un entrenamiento militar integral aunque rápido, que incluye le uso de armas, fabricación de bombas y estrategia militar, las niñas cocinan, realizan inteligencia, al igual que labores manuales, son sujetos a formas estrictas de castigo y crueldad y obligados a torturar, fusilar y participar en combates.

Las niñas y las jóvenes colombianas son victimas de acoso y abuso sexual, uso forzado de dispositivos intrauterinos, inyecciones anticonceptivas, aborto forzado y violación.
Hay total carencia de seguridad y control medico sobre los niños combatientes, por parte de los grupos reclutadores, se sabe que los niños y niñas son violentados sexualmente desde los 10 años promedio.

Los grupos narco-armados colombianos cruzan frecuentemente las fronteras de países vecinos, donde reclutan a la fuerza a solicitantes de asilo colombiano y trafican con drogas y personas.
Hay grupos narco-armados que trafican en Brasil donde se reclutan por la fuerza a niños y niñas miembros de comunidades indígenas. Los niños corren un riesgo cada vez mayor de res reclutados por estos grupos.

Otra forma frontera que esconde el reclutamiento con total impunidad es la que comparte Colombia y Venezuela por 2219 Km. De variable relieve, montañoso ene l norte, llanuras en el centro y selva en el sur.

El Ejercito Venezolano señala que es difícil custodiar la frontera venezolana de las acciones de los grupos narcos-armados colombianos, en zonas que ya son territorios de estos grupos como la de Apure.

Estos grupos tienen redes de informantes en Venezuela vinculados a secuestros y contrabando, y comerciantes y terratenientes de la zona que admiten que son victimas frecuentes de la extorsión por estos grupos. Defensores de Derechos Humanos han denunciado la existencia en la zona de Alto de Apure de las Fuerzas Bolivarianas de Liberación (FBL), un grupo de paramilitares venezolanos cuyo propósito explicito es “Defender la soberanía de Venezuela” de los grupos armados colombianos el cual esta reclutando a jóvenes de la zona.

Se les ofrece a los jóvenes sumas de dinero y drogas para vincularse a estos grupos narco-armados.

Las FBL reclutan menores de 18 años y niños de 12 años promedio en forma forzada a través de amenazas directas, la vigilancia constante en los centros educativos para identificar a sus potenciales victimas, en las zonas rurales, similares métodos que se han escuchado de las victimas de los grupos en regiones de Antioquia de cómo llegaban las Farc a las veredas y pueblos y observaban a los niños y menores potenciales y realizaban la limpieza social contra jóvenes que consumían marihuana, asesinándolos… ante la comunidad como Ejemplo.

En las fronteras con Ecuador, se encuentran tipos de mafia organizada donde hacen vulnerables la frontera para el tráfico de drogas y armas, diciendo ellos textualmente que son capaz de hacer pasar un elefante por la frontera.

Ecuador no cuenta con registro oficial de niños, niñas y jóvenes colombianos que hayan estado vinculados al conflicto armado en Colombia, ni tampoco con una política de integración con los niños refugiados que son muchas veces indiscriminados por las escuelas Ecuatorianas, y si se supiera que fueran algunos excombatientes y ciertos los que cruzan o escapan del reclutamiento, seria una tragedia contra la dignidad de los niños Colombianos.
Decenas son los menores excombatientes y cientos los que cruzan la frontera ante la amenaza de reclutamiento por parte de los grupos narco-armados, esta frontera es un verdadero agujero negro, para la infancia Colombiana.

El 30% de victimas de minas anti-personas son niños, niños mutilados y otros mueren o caen heridos por el fuego cruzado de la guerra Colombiana.

El 40% de los desplazados son niños, desplazamiento forzado de civiles ha seguido produciéndose como consecuencia de la confrontación armada entre las partes en el conflicto.
En la guerra los niños indígenas y afro-colombianas son victimas de reclutamiento por encontrarse en zonas de intereses de estos grupos.

Son muchas las maneras en que el conflicto sigue niñas y niños colombianos fuera del país. Estos niños generalmente no tienen acceso a educación y salud y son vulnerables a ser reclutados y a otras amenazas a su seguridad y sus derechos.

La utilización de de niños trabajadores al servicio de los grupos armados y narcotráfico en los cultivos de coca (materia prima de la cocaína), está también ligado al conflicto, debido al papel significativo que juegan los dividendos de la droga en avivar la violencia.

En muchos casos el primero contacto que los niños con los grupos narco-armados es a través de su trabajo en la cosecha de coca.

Mas de la mitad de los niños combatientes colombianos son niñas, las cuales son explotadas como esclavas domesticas y sexuales, siendo violadas, torturadas y golpeadas por los actores del conflicto armado.
Continuara...